Elegir clínica privada o cómo volverte loca

Hola de nuevo, me ha costado, pero he vuelto. Estos últimos días he estado en modo off y la verdad es que lo necesitaba. Necesitaba este tiempo muerto para escuchar, pensar y decidir. Aunque esto último no ha sido tan fácil, porque me he vuelto loca. Con todas las letras L-O-C-A. Más de lo que estaba, que ya es decir.

Ya os dije en mi último post que mi próximo paso sería elegir una clínica privada que me ayudara a conseguir mi objetivo. En la SS me ha ido fatal, la causa, nadie lo sabe, pero el resultado es de asustar: quince óvulos y un sólo embrión de mala calidad; con un semen, a priori, en perfectas condiciones. Bueno, eso ya es historia, ahora toca pasar página y buscar otro camino, y ya lo hemos encontrado.

Buscar clínica ha sido un auténtico quebradero de cabeza. Tenía claro que más que una clínica lo que iba a elegir era un/a médico. Una persona que me inspirara confianza y me diera soluciones, que tuviera experiencia y pudiera darme un poco de esperanza. Pues bien, hemos ido a tres clínicas en últimas semanas y la cosa ha ido así:

(Antes de nada perdonad que no dé nombres, no quiero hacer buena ni mala propaganda a nadie, si alguien quiere información porque es de mi zona, Bizkaia, puede escribirme un mail a lorartemail@gmail.com, o un privado por twitter y le contestaré encantada)

CLÍNICA NÚMERO UNO: El médico muy majo, pero no nos contó nada que no supiéramos ni nos dió la sensación de que tuviera alternativas para nosotros. Me pareció un poco obsoleto todo. Le pregunté por sus laboratorios y qué incubadoras tenían, me dijo que no era partidario de las incubadoras con sistema de video time-lapse (es decir, las que controlan a los embriones a través de una cámara de vídeo. Eso hace que no tengan que sacarlos para mirar cómo van, con lo que no se altera su temperatura, etc. Además posibilita una selección de los mejores embriones porque dan mucha más información de los mismos). Este médico en cuestión decía que si mis embriones eran de mala calidad poco o nada se iba a poder conseguir con este tipo de incubadoras (que ellos no tienen, obviamente). Además me comentó que pocas veces llevaban los embriones a blasto y eso me recordó demasiado a la SS. Descartada X

CLÍNICA NÚMERO DOS: A esta clínica fuimos porque es de un ginecólogo muy conocido en Bizkaia. Es pequeña, familiar y tiene buenos laboratorios. Aquí si nos hablaron de las incubadoras con video time-lapse, ellos tenían dos tipos diferentes y eso nos gustó. También me hizo una ecografía y me dijo que tenía uno de los ovarios pegado al útero y dos adenomiomas (creo que se escribe así). Osease, que tengo endometriosis, pero que no me afecta para quedarme embarazada por in vitro así que no debo preocuparme. Os podéis imaginar cómo salí de allí...

También me dijo que no le gustaban nada los resultados de mi primera FIV por la seguridad social, que no me podía decir el por qué, pero que si en la siguiente me volvía a pasar, él no sería partidario de seguir. Osease, que me proponía hacer otro intento con ellos (sin hablar de cambio de medicación ni nada, simplemente volver a intentarlo con mejores laboratorios) y si nos volvía a pasar lo mismo, dijo literalmente "yo no te haría sufrir más". Conclusión, que si no iba bien, a ovodonación. Pues con todo el dolor de mi corazón, porque me había imaginado mi positivo con ellos... Descartada X

CLÍNICA NÚMERO TRES: A esta clínica sinceramente no iba a ir en un principio. En estos años he leído mucho y me he "sobreinformado" seguramente, pero había llegado a la conclusión de que los médicos que tienen son como robots, estoy exagerando sí, pero últimamente se habla mucho más de su poca sensibilidad y humanidad que de sus resultados. Peeeeerooo... a través de conocidos ha llegado a mis oídos el nombre de un médico que trabaja ahí y que debe ser muy muy bueno (sí, he puesto dos "muy"s), un conseguidor de milagros dicen. En fin, no es que me lo crea a pies juntillas, pero tenía que conocerle. Me hizo una ecografía, me miró el útero (todo bien, él no me vió nada raro) y también los folículos antrales de mis ovarios. Contó doce, dijo que estaba muy bien para una antimulleriana de 1.4, pero claro, otra cosa era la calidad... Y acto seguido me dijo... "pero eso se puede mejorar y ahora os voy a decir cómo".

Os juro que cuando oí eso casi lloro. Os lo juro. Ya sé que hay soluciones, que se puede recurrir a la ovodonación, y después de mis dos primeras visitas a clínicas ya me estaba mentalizando. Pero siempre duele renunciar a tus genes, y ahora este médico me ha vuelto a dar esperanza. Me ha explicado que es verdad que los óvulos son los que son, que tienen mi misma edad, 35 años (los cumplí hace una semana y me cayeron fatal por cierto), pero aunque la "masa" no se pueda mejorar, sí sus "ingredientes". Se puede ayudar a los óvulos y mejorarlos para hacer mejores embriones. Esa es su opinión. No me prometió milagros, pero me ofreció dos alternativas: volver a intentarlo más o menos como la vez anterior y ver que pasa (es decir, confiar en que fue un mal ciclo y rezar para que sus laboratorios obren el milagro) o preparar mis óvulos durante unas semanas con una serie de complementos para responder mejor a la estimulación y tener (o intentarlo al menos) mejores ovocitos.

Y hemos decidido que vamos a poner toda la carne en el asador desde ya. Para qué intentar un ciclo "normal" si podemos ir con toda la artillería. Sí aún así conseguimos embriones de mala calidad otra vez, será que tenemos que pasar al siguiente nivel. Pienso que es la forma más rápida de salir de dudas. 

Otra cosa que me gustó de este médico es que me dijo que mis óvulos no tenían por qué ser de mala calidad. Que no hay nada que lo indique, así que él va a sospechar de los espermatozoides también y nos habló de hacerles la técnica MACs (algo de lo que os hablaré más adelante pero que sirve para seleccionar a los mejores de cara a la FIV-ICSI).

En resumen, que en esta clínica que no me gusta porque parece un hipermercado de la fertilidad, hay un médico que podría hacer nuestro sueño realidad, que nos propone alternativas, y finalmente le vamos a dar una oportunidad. Eso sí, me voy a tener que dopar cosa mala. En los siguientes posts os iré hablando de cada complemento y medicamento que me tome, de momento, para no alargarme, os dejo la lista:

1.- Seidivid

2.- DHEA (también conocida como la hormona de la juventud, sólo de venta en Andorra)

3.- Anticonceptivas

4.- Meriestra

5.- Viagra (sí, habéis leído bien... cuando sepa para qué, os lo contaré)

Todo esto, previo a la estimulación. Es lo que llaman "preparación de folículos antrales". Este sábado me bajó la regla, así que supongo que en breve empezaré con los complementos y las pastillitas varias. Os iré contando. 

¡Ah! También quería deciros que para preparar mi cuerpo de cara a lo que se me viene encima he ido a una nutricionista. Tengo migrañas y sé que las anticonceptivas y la meriestra me van a matar, así que voy a intentar ayudar a mi cuerpo a depurar y asimilar. Me han dado una dieta especial para la fertilidad que también os contaré en otro post. ¡Tengo tantas cosas que contaros!

Esta vez os prometo volver pronto con toda la información. Mil besos y gracias por estar ahí!!!!

P.D: A medida que avance el tratamiento y conozca mejor la clínica que he elegido, sea para bien o para mal, seguramente daré el nombre para poder ayudar a las que estáis en este proceso. Entretanto, os recuerdo que podéis preguntarme por privado vía mail o Twitter.