Bye-bye cuerpo lúteo

Hoy toca entrada cortita para manteneros informadas. He tenido una semana de locos en el trabajo y el fin de semana básicamente había decidido que iba a ser de desconexión. He hecho poco más que vaguear, la verdad. No sé si ha sido muy buena idea lo de tomarme el fin de semana de relax, porque hemos salido más bien poco de casa y eso ha suscitado alguna que otra discusión con medianaranja. Ya sabéis de esas que te hinchan los hormonados ovarios y que te ponen la cabeza del revés. De esas en las que te parece que se te viene el mundo encima y al de un rato te das cuenta de que, en fin, pues igual no era para tanto. Pero claro, señores, recuerden que una servidora va hormonada hasta las cejas. Mira que se lo tengo dicho a medianaranja, no me sigas el rollo, ten paciencia, simplemente déjalo estar y pasará. ¡Pues no! Qué le gusta una discusión a este parejo mío...

De todas formas no quiero llenar este post con mis vicisitudes conyugales. Este post es para daros la noticia de que finalmente se ha cumplido lo que dijo el Dr. M:

EL SR. LÚTERO SE HA IDO, HA ABANDONADO MI OVARIO DERECHO

YIHAAAAAA!!!!

Me dieron la gran noticia el jueves pasado, pero no había tenido tiempo para contarlo en el blog. El cuerpo lúteo que me vieron en la ecografía de la semana pasada (y que gracias a medianaranja bauticé como "Sr. Lútero") se ha ido. Mis dos ovarios están en reposo. Conclusión: esta noche me quito el parche anticonceptivo y el próximo viernes, independientemente de cuándo me haya venido la regla,  empezaré con la estimulación. Será diferente a todo lo que he hecho hasta ahora, ya os he ido contando que me va a tocar estar en modo yonki total. Os lo detallaré todo en mi próximo post, lo prometo. Ya os  adelanto que empezaré con viagra. Ojalá no tenga el mismo efecto en los hombres que en las mujeres, porque tengo que tomarme una cada doce horas y... ¡¡¡¡me va a pillar en el trabajo!!!

Ya os contaré cómo lo llevo... De momento, esta noche puede ser el principio de algo que nos cambie la vida para siempre. Fuera anticonceptivo, dentro optimismo y nueva vida. Una vez más os pido que crucéis los dedos por mí.